lunes, 12 de abril de 2010


Practicar la ley del dar es muy sencillo: si deseamos alegría, démosles alegría a otros; si deseamos amor, aprendamos a dar amor; si de­seamos atención y aprecio, aprendamos a prestar atención y a apreciar a los demás; si deseamos riqueza material, ayudemos a otros a conseguir esa riqueza. En realidad, la manera más fácil de obte­ner lo que deseamos es ayudar a los demás a con­seguir lo que ellos desean. Si deseamos recibir el beneficio de todas las cosas buenas de la vida, aprendamos a desearle en silencio a todo el mun­do todas las cosas buenas de la vida. (Chopra)

Mucha gente no conoce el Roffo hasta que le toca de cerca. El Hospital tiene un
presupuesto inimaginablemente bajo que no alcanza para prácticamente nada.
Muchísimas son las carencias que no llegan a cubrirse ni con las donaciones
( poquísimas en relación a otras instituciones apadrinadas por personajes de la
cultura o la farándula ) que generosamente hacen ex pacientes y personas
comprometidas con el bienestar ajeno.
Las esperas en los distintos servicios y las internaciones, algunas de varios meses,
se hacen interminablemente largas y angustiosas.
Es por eso que entre otras cosas necesitamos:
- televisores,
- video cassetteras ( ahora que todo el mundo las cambio por DVD ),
- películas en video,
- radios portátiles y radiograbadores.
- Computadoras.
- Láminas decorativas para alegrar los pabellones y
revistas para hacer más llevadera la espera.
- mesitas pequeñas ( para poner las revistas en las salas de espera ),
- plantas de interior y exterior.
- Bancos y sillas,
- almohadas, frazadas,
- platos, cubiertos, vajilla en general para médicos y enfermeras.
- Con bastante urgencia necesitamos una mesa de 2 planos para que los médicos de
quimioterapia trabajen comodamente
- una mesa para computadora.

Desde luego es importantísimo el dinero que quien así lo
desee pueda donar para seguir equipando el Hospital
con los insumos tan caros e imprescindibles para combatir
esta grave enfermedad que en el último año ha duplicado
prácticamente la cantidad de consultas en nuestros servicios.

El cáncer no conoce de edades, colores ni religiones,
nos puede afectar a todos y entre todos tenemos que luchar para combatirlo.

Si usted cree que puede ayudar, todo, por chiquito que sea sirve para mejorar la vida de quienes
se atienden o trabajan en el Hospital.

"Cuando pierdas el temor...algo nuevo encontrarás"

Sra Teresa Dolz - Vicepresidente

Sra. Cristina Speluzzi ( Voluntaria )

15-5001-3832

Fundación "Ángel H. Roffo"
3°. piso, Pabellón Costa Buero
Av San Martín n°5.481
Ciudad Autónoma de Buenos Aries
(011) 4504-0919
fundacion@instituto roffo.com.ar